Portugal afianza su crecimiento superando la media de la zona euro en el primer trimestre de 2023

El FMI pronostica un 2,6% de crecimiento económico para Portugal superando las previsiones del Gobierno de Costa

Departamento de Comunicación de VINCES

Los sucesivos escándalos que han salpicado recientemente al Gobierno portugués, como la discrepancia pública mantenida por el primer ministro, António Costa, con el presidente, Rebelo de Sousa, a raíz de la dimisión presentada por el ministro de Infraestructuras, João Galamba, acusan el desgaste de un Gobierno que, tratando de evitarlo, se está apoyando en las concesiones sociales y en las buenas previsiones económicas.

Y es que, paralelamente a los escándalos, Portugal afianza su crecimiento, habiendo superado la media de la zona euro en el primer trimestre de 2023. El FMI avala también los buenos datos económicos y establecen un pronóstico de crecimiento más elevado (2,6%) que el previsto para este año por el propio Gobierno y por el Banco de Portugal (1,8%).

Abril, 2023: la mejor cifra de paro en dos décadas y una ligera bajada del precio de los alimentos que se podría ver afectada ante una sequía agravada

Portugal ha cerrado este mes de abril con 295.422 parados, la cifra más baja de los últimos cinco meses y la mejor para dicho mes en los últimos 20 años.

También desciende, tras 18 meses consecutivos de subidas y de haber registrado en el mes de febrero la subida de precio más alta desde 1985, el precio de la cesta de la compra (0,1%). Una ligera bajada que se produce, mayoritariamente, con anterioridad a la medida de eliminación del IVA puesta en marcha por el Gobierno socialista de Costa para los productos de primera necesidad. La medida permanecerá vigente sobre 44 productos hasta el próximo 31 de octubre.

No obstante, la situación de sequía severa y extrema que vive el país y que afecta a un 40% del territorio, podría provocar un fuerte impacto, según afirma el Ministerio de Agricultura, tanto sobre el sector agrícola como sobre los ingresos de los agricultores y ganaderos, y en consecuencia podría afectar  a los precios de los alimentos. A pesar de las lluvias registradas entre el 26 y el 31 de mayo la situación de sequía no muestra signos de remitir y está afectando principalmente a las zonas del valle del Tajo, Alentejo y Algarve, tal y como asegura el último balance del Instituto Português do Mar e da Atmosfera (IPMA).

Para hacer frente a la sequía y con el apoyo de Francia e Italia, Portugal ha unido su voz a la de España y ha pedido a Bruselas, durante el Consejo de Ministros de Agricultura y Pesca de la UE,  la activación del fondo de reserva de crisis de la Política Agraria Común (PAC) y el aumento, hasta el máximo permitido, de los anticipos, para que los agricultores cuenten con más recursos que les ayuden a paliar las consecuencias de la falta de agua.

Portugal: una potencia imparable en energías renovables

Tal y como señalan los últimos datos de Eurostat, Portugal se sitúa como el cuarto país europeo con la matriz eléctrica menos contaminante. Durante el primer trimestre de 2023, el 72% de la energía lusa fue de origen renovable.

Y es que si de algo no existe duda es del compromiso del Gobierno de Costa con la transición energética, que comenzó a impulsar ya desde el año 2015, fijando ambiciosas metas. Entre las más recientes, la producción del 80% de la electricidad con energía renovable en 2026, recortando en cuatro años la meta establecida por la propia Comisión Europea.

Un ecosistema que está atrayendo la inversión de numerosas empresas, con medidas y acciones como la subasta de proyectos de energía eólica marina que tendrá lugar este mismo año.

Tal y como afirma el propio ministro de Medio Ambiente y Energía, Duarte Cordeiro, “hemos creado las condiciones para agilizar este movimiento. Para nosotros es muy importante acelerar la descarbonización de nuestra economía”. Según los datos ofrecidos por este ministerio, los proyectos energéticos previstos en Portugal rondan ya los 60.000 millones de euros.

Bruselas prevé una moderación en la inflación y una progresiva disminución de la deuda portuguesa

El paquete de primavera de la Comisión Europea indica que a pesar de los desequilibrios macroeconómicos que se continúan detectando en países como Portugal, las vulnerabilidades están disminuyendo, al punto de que, manteniendo esta evolución, en un año se podría reconocer la falta de desequilibrios. En este sentido, el Ejecutivo comunitario prevé una progresiva disminución de la deuda lusa, que ya se contrajo considerablemente en 2022 (hasta el 113,9%), y una moderación de la inflación que se situaría en 5,1% en 2023 y continuaría descendiendo durante el próximo ejercicio económico.

En este sentido, el propio gobernador del Banco de Portugal, Mario Centeno, daba por encaminada la inflación en la zona euro a finales del mes pasado durante un encuentro en el Cercle d’Economia en Barcelona.

Así mismo, aunque la Comisión prevé un debilitamiento del crecimiento económico de Portugal durante el segundo trimestre de este año, pronostica un repunte durante los dos últimos, apoyada por un turismo que ya mostró un fuerte aumento a principios de año y una continua relajación de los precios de la energía gracias a las políticas implementadas de apoyo a la eficiencia energética y a las energías renovables.